Haz emplatados espectaculares
Día tras día, semana tras semana, cocinamos siempre lo mismo y llega un punto en el que hasta nosotros mismos nos cansamos. Te proponemos que para esa ocasión vistas tus platos con mucha más originalidad debido a algunas técnicas de emplatado que dejarán a tu comensal con la boca abierta.
El hecho de emplatar de forma bonita y correcta un plato le dará un valor añadido a nuestra creación. ¿Y qué es lo que tenemos que tener en cuenta a la hora de emplatar? Pues no existe un aspecto que sea primordial sino que la suma del color, la distribución, el volumen y la decoración son esenciales para un buen emplatado.
El color
Poniéndonos en el lugar del comensal, cuando pedimos un plato esperamos recibir un emplatado con colores que ya nos esperamos. Es decir, si hemos pedido un plato de carne y nos introducen un tono azulado en algún detalle dentro del plato, nuestra percepción sobre el plato chocará y tendremos una sensación negativa sobre el mismo. Por lo tanto, podemos potenciar los colores marrones o rojizos de la carne que nuestros comensales se esperen. Además, si te apetece innovar un poco más, puedes meter colores complementarios en los tonos de tu plato.
¡No nos olvidemos del color del cocinado! Los colores que aparezcan en tu plato también transmitirán el estado de cocinado de tu producto: crudo, muy hecho, fresco… ya sean pescados, carnes o cualquier otro tipo de comida.
La distribución
Dependiendo de qué tipo de distribución hagas con los ingredientes de tu plato podrás provocar una sensación u otra. Incluso hay platos que han tenido una mayor repercusión positiva debido a su disposición de los elementos.
Te comentamos los tres tipos de disposiciones que hay dentro de un plato:
- Central: es el que más se utiliza y centra el foco de atención, proporcionando simetría y orden al plato.
- Lateral: te provoca un desplazamiento visual en el plato y provoca un mayor dinamismo a tu plato. Puedes probar a hacer este emplatado para conseguir un plato más divertido.
- Disperso: muy útil si como gran chef quieres contar una historia con la colocación de los elementos.
El volumen
No os aconsejamos meter mucha cantidad de comida si quieres que tu plato sea fino y elegante. Muchas veces saturamos a nuestros comensales con tanto ingrediente cuando basta con unos pocos dando sensación de ligereza y sabor.
La decoración
Este es el toque final que debes dar a tu plato. Prueba a hacerlo con salsas o con hojas de flores, dependiendo del plato que quieras presentar. Recordemos que no hay que saturar al comensal con muchos elementos decorativos… ¡mejor que falte a que sobre!